Este descubrimiento tan asombroso que ha colapsado los medios de comunicación por su importancia e implicación en los futuros avances tecnológicos, resulta un poco complejo de entender para quienes no siendo expertos en la materia deciden interesarse por el. En nuestro Círculo de Ares contamos con un miembro cuyas inclinaciones intelectuales están orientadas hacia las ciencias y cuyos intereses en este campo están muy unidos a su elección en los estudios: Juan Luis Muñoz nos trata de explicar en qué consiste este descubrimiento y qué consecuencias se derivarán de el.
¿Qué son las ondas gravitacionales? Las ondas gravitacionales son ondas como las de la luz y el sonido con un estilo de movimiento similar a las de las ondas de un estanque, su existencia data de 1916, fecha en la que Albert Einstein habló de la teoría de la relatividad, aunque no pudo oficialmente demostrar su existencia. Hoy en el 2016 el Centro de Investigación astronómica del LIGO, ha sido el primero en detectar, aunque muy débilmente la vibración de las mismas. ¿Cómo pudieron detectarlas? Utilizan un aparato muy complejo que envía una onda láser a las afueras de la tierra, capaz de llegar a millones de años luz de distancia y con una sensibilidad asombrosa para la detección de mínimos cambios en el Cosmos. ¿Cómo han aparecido? La detección se ha realizado a años luz de distancia, cerca del vórtice u horizonte de sucesos de la fusión de dos agujeros negros masivos produciendo una cantidad de energía equivalente a tres soles por segundo, lo que sería una cantidad abusiva de potencia de varias bombas atómicas. Para que nos hagamos una idea aproximada, esta onda es capaz de partir, mover, desplazar y provocar explosiones en estrellas y planetas a su alcance. Sin embargo, la frecuencia de esta onda es sorprendentemente diferente a todo lo visto hasta el momento. Tiene una velocidad superior a la luz, lo que explica la detección de esta onda por el láser LIGO. ¿Son peligrosas? Son misteriosas, pero su capacidad de destrucción es tremenda estando a la distancia justa (miles de años luz). ¿Qué nos puede llegar a aportar este descubrimiento? Hasta ahora solo hemos conocido un 5% del Universo, lo que equivale al Universo visible (Aquello que se ve con la luz, desde los rayos gamma hasta las ondas de radio). Esto nos abre al estudio la plenitud del Universo casi al completo, suponemos que hay muchas cosas que no sabemos, a partir de ahora se abrirán nuevos horizontes. Conocer incluso el inicio de nuestra propia existencia, el origen del Cosmos, el Big Bang… esta es una nueva ciencia de estudio: La Astronomía de las Ondas Gravitacionales. Uno de los misterios más importantes es el de la distorsión del espacio y el tiempo, cambiando el hecho de que los viajes en el tiempo sean una realidad, ya que se supone que uno de sus efectos será la dilatación o la contracción del tiempo, es decir que el tiempo vaya más o menos deprisa de lo que consideramos normal (agujeros negros). La posibilidad de mandar sondas al interior de un agujero negro y obtener los datos cuánticos de la estrella rutilante que se esconde en su interior también denominada la perla, gracias al uso de estas ondas gravitacionales puede ser una realidad ya que la luz ni siquiera escapa a ese oscuro horizonte. Tras estas preguntas de nuestro escritor más aficionado a cuestiones científicas, me temo que el resto de los escritores del Círculo de Ares nos hemos quedado como al principio. Aplaudimos el descubrimiento, pero seguiremos indagando en nuestra fantasía porque en este Cosmos que nos presenta la Ciencia nos resulta bastante imposible
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septiembre 2020
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